Revista Catolica Dallas launched in the summer of 2011 after an ambitious editorial redesign project looked at invigorating the voice of the Spanish speaking families and the ministry to them by the Catholic Diocese of Dallas. Revista Catolica has its roots in El Católico de Texas, an eight-page tabloid newspaper produced during more than 20 years in conjunction with The Texas Catholic.
In today’s media landscape, Revista Catolica Dallas stands as a unique publication helping U.S. Hispanics through community- and family-oriented articles to live more connected with their Catholic faith.
Revista Católica Dallas se lanzó en el verano de 2011 después de un ambicioso proyecto de rediseño editorial que buscaba revitalizar la voz de las familias de habla hispana y el ministerio hacia ellas, por parte de la Diócesis Católica de Dallas. Revista Católica tiene sus raíces en El Católico de Texas, un tabloide de 8 páginas producido durante más de 20 años en conjunto con The Texas Catholic.En el panorama mediático actual, la Revista Católica Dallas se erige como una publicación única que ayuda a los hispanos de Estados Unidos a través de reportajes comunitarios a vivir más conectados con su fe católica.
Han pasado 29 años desde que una parroquia en la Diócesis de Dallas ofreciera por primera vez a su feligresía los Talleres de Oración y Vida (TOV). El espíritu que impulsó a los pioneros de esta obra de evangelización en nuestra diócesis, se mantiene vivo y vibrante.
Los esposos Eduardo y Magdalena Egúsquiza, oriundos del Perú y feligreses de la Iglesia de María Inmaculada en Farmers Branch, trajeron los TOV a Dallas en 1996, movidos por el deseo de compartir las bendiciones que ellos recibieron después de transformar su vida de oración.
DALLAS—Ser bilingüe va más allá de hablar dos idiomas, es capturar y vivir dos culturas que crean una identidad. En la Academia Católica de Santa Clara de Asís, este es un modo de vida que plasman día a día maestros y estudiantes, pero es la celebración anual de la Herencia Hispana, el momento esperado para reflejar con gozo las múltiples caras que tiene nuestra hispanidad.
El 26 de septiembre fue para Sarema Rivera, alumna de octavo grado, la ultima participación que tendrá en esta icónica celebración escolar, antes de terminar su escuela intermedia.
Y es que el orgullo de celebrar, compartir y aprender de cada pueblo hispano, lo ha sentido desde que entró en kínder garden, pero lejos de sentir melancolía la chica de 13 años, está llena de orgullo y grandes memorias.
“Recuerdo que de pequeña veía a los estudiantes más grandes bailar y compartir y hoy me alegra que otros niños pequeños aprendieron de mí”, dijo Rivera hija de padre puertorriqueño y madre mexicana.
La joven representó junto a sus compañeros de clase al país centroamericano de El Salvador. Otras clases representaron los países de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, España, México y Perú.
AMOR POR LAS RAÍCES
Los estudiantes vistieron trajes típicos, compartieron bailes, comida y un ‘museo viviente’ en el que compartieron la música, deporte, arte y expresiones de fe de esas naciones.
“Me sentí bien orgullosa y muy alegre de ser salvadoreña”, dijo Paola Navas de octavo grado e hija de padres salvadoreños. “Mis compañeros también se sienten orgullosos de sus raíces”, agregó.
“Es una gran oportunidad para traer un pedacito de nuestra tierra, a otra tierra que nos ha abierto las puertas e inculcar a nuestros estudiantes el amor por sus raíces, por su gente”, dijo Glenda Salazar, profesora de octavo grado, originaria de El Salvador y quien ha enseñado en Santa Clara por cinco años.
“Somos la única escuela en la Diócesis de Dallas que es bilingüe entonces los estudiantes están fuertemente potenciados tanto en el inglés como en el español”, agregó.
“Yo siempre les digo a mis alumnos, esto es como una cadena, si tu te atas a través de tu cultura, esto no se rompe y continua por los siglos de los siglos”, dijo.
“Celebrar la diversidad de nuestras culturas es sentirse orgulloso de nuestra educación y de donde venimos”, agregó la maestra Samantha López de descendencia mexicana.
Jorge Acosta, estudiante de sexto grado, dijo que el sombrero vueltiao típico colombiano, es un recuerdo que se quedará para siempre en su memoria porque le gustó “como se viste la gente en ese país sudamericano y me siento orgulloso de ser hispano”.
El maestro Héctor Guzmán, director de la Sinfónica de Irving, compartió una sesión de preguntas y respuestas e invitó a la comunidad escolar a reconocer la importancia de la educación y estar siempre orgullosos de nuestras raíces.
“Es siempre de orgullo compartir nuestras raíces, sobre todo a niños de esta edad, que todo lo absorben como las esponjas,” dijo a Revista Católica Dallas el talentoso músico originario de Zacatecas y quién migró hace 40 años a Estados Unidos.Guzmán también dirige la Sinfónica de Plano y la orquesta de San Angelo y Corpus Christi.
La directora Jennifer Fernando dijo que esta es una de celebraciones más importantes para Santa Clara y alabó la ayuda de padres voluntarios que dieron de su tiempo y esfuerzo para planear la decoración y la comida.
“Esta celebración es una riqueza porque nos motiva a entrelazarnos como hermanos, ver nuestros nexos culturales, pero también espirituales, porque nuestras raíces de fe están muy unidas a nuestra cultura”, dijo el padre Richard Arriaga, originario de Ecuador y vicario de la parroquia de Santa Clara de Asís.
Pie de Foto: Dos estudiantes de la escuela de Santa Clara de Asís demuestran un baile típico en la Celebración de la Hispanidad, realizada el 25 de septiembre de 2025. Foto: Especial para RC/María Olivos
De la misma manera que la parroquia tiene el deber de servir a la comunidad, la escuela parroquial es parte esencial de ese mismo ambiente de servicio y misión. La escuela también tiene el deber de servir a la comunidad a la que pertenece, y su labor no puede entenderse separada de la vida parroquial. Por eso, construir puentes entre parroquia y escuela no es un detalle secundario, sino el primer paso para asegurar el éxito de la tarea evangelizadora y educativa que compartimos.
NUEVA YORK(OSV News) — Un nuevo mural de 7.6 metros de altura que cubre las paredes de la entrada de la Catedral de San Patricio, y que fue dedicado antes de una Misa el 21 de septiembre, celebra la historia sagrada y secular de Nueva York.
Se trata de la obra de arte permanente más grande encargada en los 146 años de historia de la “Iglesia Parroquial de Estados Unidos”, como se le conoce a la catedral.
De cara al Santísimo, abriendo los oídos y los ojos del corazón, decenas de niños y jóvenes servidores del altar, así como familias enteras participaron el 8 de agosto en la primera Hora Santa Vocacional en la parroquia de María Inmaculada en Farmers Branch.
Momentos de oración, meditación y de dulces cantos, se dejaron sentir ante Jesús Sacramentado, “pidiendo a Dios que suscite en nuestra parroquia más vocaciones sacerdotales, religiosas y matrimonio santos”, explicó Willy León quien hace parte de la coordinación del grupo de monaguillos “Sociedad Santo Domingo Sabio”, integrado por cerca de 30 niños y jóvenes.
“Unidos en oración” junto a la comunidad parroquial, destacaron la necesidad de que los monaguillos acompañen su servicio y formación, con la oración frente al santísimo, siendo “el ministerio de monaguillos un semillero de vocaciones”, resaltó León.
El padre Fergal O’Duill, originario de Irlanda, misionero de la orden de los Legionarios de Cristo, y director del Ministerio de hombres Regnum Christi en la escuela The Highlands, fue invitado en esta oportunidad, guiando momentos de reflexión y compartiendo cómo Dios lo llamó a la vida sacerdotal.
“Este es nuestro trabajo ahorita”, agregó León explicando que al exponerlos a una Hora Santa Vocacional niños y jóvenes van a escuchar sobre el llamado y de ahí poco a poco irles cultivando la vocación.
“Tenemos que comenzar a hablarles desde niños, desde jóvenes y decirles acuérdate que tienes una vocación que Dios te va llamar, ya sea matrimonial, sacerdotal o vida consagrada. Ponerlo en su mente y en su corazón y de esa manera en algún momento de su vida adulta puedan responder a Dios con generosidad, ya con una formación”, dijo León.
Edith Rangel, es madre de siete hijos, dos de ellos monaguillos que recién comenzaron a servir en el altar este verano y quiso ayudar en la organización de esta primera Hora Santa Vocacional.
El coro de niños de la Iglesia de María Inmaculada los acompañó, en lo que tomó un mes de preparación y coordinación, pero sobre todo ayudando “con oración” para que se moviera “el Espíritu Santo esa noche”, explicó Rangel.
Rangel se emociona de ver a sus hijo Levi Guzmán de 10 años y Juan Pablo Guzmán de 8, servir como monaguillos, pues ella de joven fue también servidora de altar, en la parroquia de Santa Mónica en Dallas. Ahora, junto a su esposo Elíseo Guzmán, pertenecen a la Iglesia de María Inmaculada.
“Es importante orar por las vocaciones de nuestros hijos”, enfatizó Rangel, pues “como padres siempre queremos lo mejor para nuestros hijos y lo mejor que les podemos dar es la fe en Dios”, dijo.
La familia, “es nuestra iglesia doméstica, por lo que es muy importante que como padres asistamos a las Horas Santas Vocacionales”, señaló y agregó que “nosotros también estamos viviendo una vocación en nuestro matrimonio y nos toca guiar a nuestro hijos en el camino de Dios, tanto haciendo oración constante con los niños, como juntos en la iglesia, plantando esa semillita en cada uno de ellos”.
Esta Hora Santa también fue una invitación para más niños y jóvenes que se quieran unir al grupo de monaguillos. Al terminar hubo un tiempo con refrigerio para charlar directamente con los sacerdotes sobre cualquier inquietud vocacional.
Pie de Foto: Isabela Lara (Izq) y Daniela Colorado,miembros del grupo de monaguillos Sociedad de Santo Domingo Sabio en la parroquia de María Inmaculada en Farmers Branch, participan de la Hora Santa Vocacional, el 8 de septiembre de 2025. Foto: Especial para RC/Tacho Dimas
En un momento en el que las personas se sienten impotentes para ayudar a los migrantes y refugiados, los cristianos deben seguir insistiendo en que “no hay justicia sin compasión, ni legitimidad sin escuchar el dolor de los demás”, afirmó el Papa León XIV.
Carteles del papa León XIV se alinean en las calles principales de la ciudad peruana de Chiclayo, donde una silueta a tamaño real del pontífice se encuentra en el balcón del ayuntamiento saludando a los peatones que pasan por la plaza principal de la ciudad.
El papa estadounidense, que como obispo Robert Prevost sirvió a la diócesis de Chiclayo entre 2015 y 2023, se ha convertido en una figura célebre en esta ciudad de medio millón de habitantes, donde se le trata como si hubiera nacido allí.
Para Noel Aguilar el primer lugar en su lista de prioridades no ha variado desde que tenía 10 años y se hizo monaguillo en su parroquia, la Iglesia de San Lucas en Irving. A dos meses de cumplir sus 16, el joven nacido en Dallas, de padres mexicanos, ha decidido que cualquier otra actividad, siempre viene después de servir en las misas de su parroquia.Tímido y de pocas palabras, Aguilar siempre sintió el deseo de ser monaguillo, pero tuvo temor por su carácter reservado. Hace seis años y motivado por su hermana menor, decidió intentarlo y se convirtió en un modelo a seguir para los demás niños.
Si se trata de ayudar, Elvira Pérez siempre ha dicho “aquí estoy” para la comunidad de la escuela de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro (OLPH). Si se trata de deleitar el paladar, padres, maestros y estudiantes, saben que cuentan con “la sazón de la señora Pérez”, como llaman cariñosamente a la encargada de la cocina en ese plantel diocesano del sur de Dallas.
Durante las últimas dos décadas, Pérez de 68 años y cuyos cinco hijos se graduaron de OLPH, se ha dedicado a alimentar con esmero a los más de 150 estudiantes que tiene el plantel.
El mayor riesgo en la vida es desperdiciarla al no buscar seguir el plan de Dios, dijo el Papa León XIV al proclamar a dos nuevos santos: dos jóvenes laicos de los siglos XX y XXI.
“Los santos Pier Giorgio Frassati y Carlo Acutis son una invitación para todos nosotros, sobre todo para los jóvenes, a no malgastar la vida, sino a orientarla hacia lo alto y hacer de ella una obra maestra”, dijo el Papa el 7 de septiembre
El 3 de marzo [de este año], el papa Francisco (†) declaró que los migrantes del mundo son “misioneros de la esperanza”, un título empoderador y el tema de la 111.ª Jornada Mundial del Migrante y del Refugiado, que se celebrará los días 4 y 5 de octubre de 2025. Esto contrasta radicalmente con el discurso deshumanizador que encontramos en la actual administración Trump.

Constanza Morales was born in Bogota, Colombia and graduated from Universidad de la Sabana as a journalist. She started her career as a magazine writer before moving to the U.S. to receive a master’s degree in investigative journalism at Florida International University. She joined the Diocese of Dallas in 2018 as the managing editor for the Spanish publication named El Católico de Texas. She was the head of the team that in 2011 redesigned the publication and created Revista Católica Dallas. Constanza and her husband Jorge have been married for 18 years and have two kids.