Matrimonio peruano es pionero en transformar la vida de oración, de decenas de miles de católicos en Dallas.
Por Jannie Guzmán
Especial para Revista Católica Dallas
FARMERS BRANCH—Han pasado 29 años desde que una parroquia en la Diócesis de Dallas ofreciera por primera vez a su feligresía los Talleres de Oración y Vida (TOV). El espíritu que impulsó a los pioneros de esta obra de evangelización en nuestra diócesis, se mantiene vivo y vibrante.
Los esposos Eduardo y Magdalena Egúsquiza, oriundos del Perú y feligreses de la Iglesia de María Inmaculada en Farmers Branch, iniciaron los TOV en Dallas en 1996, movidos por el deseo de compartir las bendiciones que ellos recibieron después de transformar su vida de oración.
Los TOV fueron creados por el sacerdote capuchino español, Ignacio Larrañaga en el año 1984. Su objetivo fue enseñar a las personas un método práctico y profundo para orar, vivir la fe y transformar su relación con Dios, con ellos mismos y el prójimo.
“Los Talleres de Oración y Vida nos impactaron tanto, que decidimos compartir lo recibido con otras personas, comenzando con nuestras familias”, dijo Magdalena Egúsquiza.
“Los talleres transformaron espiritualmente nuestro interior y nuestra visión de vida. Descubrimos la fuerza de la oración y aprendimos a abandonarnos confiados en las manos de Dios”, agregó.
La Iglesia Santa Teresita-San Juan de los Lagos fue la primera en ofrecer los TOV hace casi tres décadas y de acuerdo a los esposos Egúsquiza, la experiencia resultó alentadora.
“Había sed de aprender a orar. El impacto recibido y el entusiasmo del grupo contribuyeron a la planificación y a la propagación de estos talleres en la Diócesis de Dallas y se prepararon nuevos líderes”, comentó Magdalena Egúsquiza.
“Al ver el entusiasmo de mi esposa, inicié mi preparación en la Escuela de Formación para Líderes. El fruto de esta gestión fue la creación del primer grupo de hombres en 1998”, recordó Eduardo Egúsquiza.
Actualmente 21 parroquias de la Diócesis de Dallas ofrecen los TOV para jóvenes, adultos y matrimonios. Al momento existen más de treinta talleres a nivel diocesano.
OASIS DE DIOS
Los TOV se ofrecen en 15 sesiones orientadas a fortalecer la vida de oración y el amor a Jesús a través de la meditación de la Palabra y de la oración diaria.
“Tomar los Talleres de Oración y Vida fortaleció nuestra vida de oración. Nos ayudó a construir una relación personal sólida con Dios. Descubrimos nuestro estilo personal de oración utilizando la Escritura, y cómo aplicar lo orado a nuestra vida diaria”, dijo Magdalena Egúsquiza.
Agregó que en las sesiones se aprende y se practican los diferentes tipos de oración y se identifican aquellas que ayudan a profundizar más en la relación individual con Dios.
“Es necesario discernir el estilo de oración que más nos toca. Es una experiencia de desierto personal”, añadió.
Los TOV ofrecen un método práctico que consta de tres bloques—Palabra, Modalidad y Vivencia—para descubrir un camino más cierto y desarrollar una relación íntima con Dios.
La misión de los esposos Egúsquiza no ha cambiado después de más de 20 años. “El ser humano busca con ansia la felicidad. ¿Dónde la podemos encontrar? Los Talleres de Oración y Vida ofrecen la respuesta. Son como pequeños oasis donde las personas pueden saciar su sed de Dios y a la vez, traer a otros a beber de esa fuente”, dijo Magdalena Egúsquiza.
Más información sobre los TOV en la Diócesis de Dallas, llamando al 972-890-7773 o enviando un email a [email protected]
Pie de foto: Magdalena y Eduardo Egúsquiza, quienes iniciaron en Dallas, los Talleres de Oración y Vida, posan en la Iglesia de María Inmaculada, el 13 de agosto de 2025. Foto: Especial para RC/Tacho Dimas












