El padre Jose M. Contreras, regresó a Dallas en acción de gracias, por haber escuchado aquí el llamado de Dios.
Por Violeta Rocha
Especial para Revista Católica Dallas
DALLAS—- Antes de asumir su nueva misión como sacerdote enviado a Guinea Ecuatorial, único país africano de habla española, el padre José Manuel Contreras, hizo una parada en el lugar donde afloró su discernimiento vocacional: la Diócesis de Dallas.
El sacerdote de 41 años y oriundo de San Felipe, Guanajuato, México, vino a visitar su parroquia, la Iglesia de Nuestra Señora del Pilar, donde hace una década encontró refugio uniéndose a la comunidad del Camino Neocatecumenal.
Lleno de gratitud celebró el pasado 13 de agosto una Misa en la Catedral de Dallas y estuvo rodeado de al menos 25 compañeros del grupo de jóvenes Defensores de la Fe, que fueron testigos de su discernimiento vocacional.
“Regresar a Dallas, al santuario de la Virgen de Guadalupe, era muy importante para mi”, dijo el padre Contreras, ordenado sacerdote en septiembre de 2021 en el seminario Redemptoris Mater de Macerata, Italia.
Además de sus años de formación, el padre hizo misiones en el sur de Italia y en Albania.
“A la Virgen de Guadalupe le he pedido que sea ella la custodia que cuide mi presbiterado; ella me ha acompañado sin que yo me diera cuenta, ella me ha cuidado”, agregó.