Por Michael Gresham
Texas Catholic
“Amigos míos, tenemos trabajo que hacer”. Con estas palabras, el obispo Edward J. Burns cerró la misa del 14 de septiembre en la Catedral del Santuario Nacional de Nuestra Señora de Guadalupe, en la que cerca de 300 fieles fueron comisionados como delegados para la asamblea del Sínodo de la Diócesis de Dallas que será a finales de este año.
“Esta es una oportunidad para que observemos lo que hemos estado haciendo como diócesis y veamos si hay otra manera de hacerlo mejor en el futuro”, dijo el obispo Burns a los delegados. “Las resoluciones que recibirán son el fruto de años de debates. El trabajo que tenemos por delante es enorme, pero sabemos que esta diócesis es única y vibrante. Nuestros desafíos pueden ser diferentes, pero nuestra determinación y compromiso deben profundizarse a medida que llevamos a todas las personas a Jesucristo”, agregó.
Al comisionar a los delegados, el obispo Burns hizo un llamado a la unidad y la dedicación, instándolos a ser discípulos de Cristo.
“Como delegados a esta asamblea, deben esforzarse por lograr la unidad y el amor ”, dijo. “Recuerden, todos somos un solo cuerpo porque compartimos el cuerpo y la sangre de nuestro Señor, Jesucristo. Juntos, sigamos creando una Iglesia vibrante, viva e invitando a otros a experimentar a Jesucristo”.
Después de la misa, los delegados se reunieron en el Gran Salón para un taller en el que esperaban familiarizarse mejor con el proceso de la asamblea sinodal y recibir información sobre las resoluciones propuestas.
“El día de preparación debía marcar el tono para que los delegados entraran en un período de reflexión y oración antes de nuestra asamblea”, dijo Lacy de la Garza, directora ejecutiva del Sínodo de la Diócesis de Dallas.
“Era importante darles contexto y permitirles reunirse en un ambiente que fomentara la camaradería y el debate. ¡Estoy contenta con este gran comienzo! Diciembre llegará antes de que nos demos cuenta”.
El obispo Burns convocó al sínodo diocesano en febrero de 2021 con la publicación de su carta pastoral, “El viaje a través de la Cuaresma, la Pascua, la Ascensión y Pentecostés: Sínodo Diocesano y Plan Pastoral Post-Pandémico para la Diócesis de Dallas”, a la que llamó una respuesta histórica a la histórica pandemia del Covid19.
En diciembre 285 delegados de toda la diócesis se reunirán para elaborar un catálogo de resoluciones como parte del tercer sínodo diocesano. La asamblea diocesana se llevará a cabo del 1 al 4 de diciembre, lo que marcará la conclusión del proceso preparatorio del sínodo, que pasa a su fase de implementación.
OPORTUNIDAD APASIONANTE
Rob Hays, feligrés de Santa Ana en Coppell, y Susie Alemán, feligresa de Santa Isabel de Hungría en Dallas, sirvieron como miembros de la comisión preparatoria del sínodo y participarán en la asamblea del sínodo en diciembre como delegados.
“ Ha sido un largo camino pero emocionante”, dijo Hays, y agregó que su compromiso le ha permitido conocer y comprender al obispo Burns y su visión para la diócesis. “Creo que, particularmente después de la pandemia un momento tan difícil tanto para el país como para el mundo, el obispo Burns quería insuflar nueva vida y visión a la diócesis. Ha sido emocionante ver eso desde el principio” .
Desde febrero de 2022 hasta noviembre de 2023, la diócesis celebró 30 sesiones formales de escucha, en las que se recopilaron comentarios e información de católicos y no católicos que se analizaron y utilizaron para redactar resoluciones sinodales que se considerarían en la asamblea sinodal.
“Es fantástico ver que todos nos estamos uniendo y teniendo en cuenta todas las opiniones y deseos de la gente de la diócesis que hemos escuchado en esas sesiones de escucha ” , dijo Alemán. “Ahora tenemos la oportunidad de hacer lo mejor que podamos para representar su visión y compartirla con el obispo, para que él pueda decidir en última instancia qué es lo mejor para nuestra diócesis”.
Hays dijo que el esfuerzo invertido en ese proceso preparatorio ha sido impresionante.
“La cantidad de trabajo que ha supuesto realizar todas las sesiones de escucha, analizar todos los datos, escuchar realmente a la gente de la diócesis … ha sido un viaje tanto espiritual como práctico ”, dijo. “Es muy gratificante ser parte de un equipo que ha estado en las trincheras, uniéndolo todo”.
A medida que avanza el proceso sinodal diocesano, Hays expresó optimismo sobre el futuro de la diócesis de Dallas. “Estamos en un momento muy importante para el futuro de nuestra diócesis”, dijo. “Creo que no hay límites para lo que el Señor puede hacer aquí en los próximos 5, 10, 20, 50 o incluso 100 años”.
Pie de foto: Acompañado por sacerdotes de toda la Diócesis de Dallas, el obispo Edward J. Burns ofrece una bendición mientras comisiona delegados para el Sínodo de la Diócesis de Dallas, durante la celebración de una misa en la Catedral Santuario Nacional de Nuestra Señora de Guadalupe el 14 de septiembre.