La fe y el servicio a la Iglesia, hicieron de su matrimonio un testimonio de fortaleza y amor incondicional.
Por: Constanza Morales/ Revista Católica Dallas
Juanita Puente siempre quiso lucir un vestido de novia, pero cuando se casó con Oscar hace 54 años en Chicago, tuvo que conformarse con su vestido de graduación.
La historia cambió el pasado 17 de agosto cuando ella lució muy un vestido hecho en tela satín, que compaginó perfectamente con el lazo que llevaba puesto su esposo Oscar en el cuello.
Los esposos y veteranos feligreses de la Iglesia de Santa Cecilia en Dallas, hicieron parte de un grupo de más de 90 parejas católicas que acudieron ese día a la Catedral Santuario Nacional de Guadalupe, para recibir una bendición especial del obispo Edward J. Burns, en reconocimiento a sus bodas de oro.
La fecha fue doblemente especial para los Puente, pues un 17 de agosto de 1970 contrajeron matrimonio por la Iglesia Presbiteriana en Chicago y 14 años después en Dallas, recibieron el sacramento en la parroquia de Santa Cecilia.
EL CAMINO DE DIOS
“Nuestro matrimonio es obra de Dios. No siento más que agradecimiento por las bendiciones que Dios me ha concedido”, dijo Juanita que durante dos décadas fue catequista de primera comunión en su iglesia.
“Siempre hemos tenido a Dios por delante. Nos integramos a la Iglesia como servidores y nuestros hijos han seguido el camino de Dios”, agregó Oscar que ha sido ministro extraordinario de la eucaristía desde hace 30 años.
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Pie de Foto: Los esposos Juanita y Oscar Puente, se conocieron cuando tenían 15 y 16 años en México. La pareja se unió en matrimonio católico en la parroquia de Santa Cecilia, donde sus hijos y nietos han asistido al catecismo y servido en diversos ministerios. Foto: RC/Michael Gresham